El ciclo de frío es un aliado fundamental en la preparación de postres.
Indispensable para enfriar los semiacabados como cremas o bizcochos, es ideal también para los postres y tortas heladas
que alcanzan la temperatura de congelado sin la formación de cristales de hielo.
Respecto a los instrumentos tradicionales, nuestra tecnologia permite enfriar
rápidamente productos pasteleros acabados o en fase de elaboración, reduciendo drásticamente los tiempos de preparación.